En un mundo donde las tradiciones parecen inamovibles, surge una nueva forma de celebrar conocidas como Friendsgiving. Este fenómeno está especialmente diseñado para aquellas personas que, por trabajo o falta de tradición, no pueden celebrar con su familia, pero aún así desean disfrutar de una cena especial. Friendsgiving se enfoca en la amistad, con una atmósfera mucho más relajada y menos formal que su contraparte familiar, Thanksgiving. En resumen, es la excusa perfecta para justificar una cena llena de anécdotas y risas entre amigos.
La influencia de la tele no puede pasar desapercibida en este boom de Friendsgiving. Series como “How I Met Your Mother” y “New Girl” han hecho que quieras sentarte en una mesa improvisada cubierta de latas de refrescos y lo que hayas cocinado con tus amigos más cercanos. Y no son solo las series, las redes sociales están enloqueciendo con las celebridades como Taylor Swift y Kylie Jenner mostrando sus propias celebraciones, haciendo que todos sus fans quieran emularlas.
Friendsgiving no es solo una moda; es una manera de demostrar que la familia a veces es la que escoges. Es una noche donde te sientas, comes y compartes con quienes realmente te hacen sentir en casa, sin códigos de etiqueta que seguir más que el de divertirse. Y en el mundo actual, donde el estrés es casi una constante, compartir una buena comida con amigos suena como un respiro, ¿no crees?